Dos importantes sindicatos han instado a la Comisión Europea (CE) a que apruebe la propuesta de fusión Microsoft Activision en vísperas de una audiencia programada sobre el asunto. Hace una semana, Microsoft confirmó que había solicitado una audiencia como último intento de salvar el controvertido acuerdo.
Los sindicatos quieren que los reguladores tengan en cuenta el impacto de la fusión Microsoft-Activision en los empleados.
Trabajadores de la Comunicación de América (CWA) escribió una carta a la CE argumentando que el acuerdo tendrá un impacto positivo en el mercado laboral. En un principio, CWA expresó su preocupación por el poder que Microsoft tendría en el mercado laboral, pero más tarde consiguió negociar un convenio colectivo con la empresa en caso de que la adquisición siguiera adelante.
Por otra parte, UNI Global Union, con sede en Europa, instó a la CE a mirar más allá del impacto que el acuerdo tendrá en los consumidores y considerar también a los empleados. UNI afirma que Microsoft tendrá un impacto positivo en un mercado laboral plagado de malas condiciones de trabajo.
Hasta ahora, los reguladores han mostrado poca preocupación por el mercado laboral, comprensiblemente porque su trabajo consiste en examinar la competencia del mercado y el impacto en los consumidores y no en los empleados de Activision Blizzard.
Los críticos también señalaron la mala óptica teniendo en cuenta que Microsoft despidió recientemente a 10.000 trabajadores, incluidos empleados de Xbox.
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